Por Leire Agüero
Te esperaba
Un soplo tierno en mi piel me alertó,
que caminabas hacia mí.
Me enredó entre sus cálidos lazos.
Y fugazmente me atrapó.
Me cubrió sin miedo,
sin riesgo a romperme.
Y en secreto,
ese instante nos presentó.
Aterrizaste sin horario de vuelo.
Desprovisto de equipaje.
Envuelto en magia,
ataviada con vastas alas,
un eterno halo entregabas.
La inquietud
desvelaba mi timidez,
se entreabría ruborizándose.
Las confidencias ocultas
destapábamos.
Las palabras no escritas
pronunciábamos.
Con un horizonte por destino.
Y una senda trazada…
dábamos paso al vuelo.
En cada aleteo…
desprendíamos guiños,
listos para despegar,
por sí mismos,
al compás del viento.
El mapa señala el rumbo.
La brújula nos orienta.
Viajamos…
a la historia interminable,
el país de los anhelos,
imaginando, fantaseando,
creando…
¡Tú y yo!
Solo, tú y yo.
Te esperaba.
Nada más bello que volar con las alas del amor desplegadas, sin rumbo, sin tiempo.
Una preciosidad tus palabras.
Bonitas palabras las tuyas Yvonne.
Muchísimas gracias. 😉
Sin mapa y sin rumbo… pero te he encontrado, siguiendo el aleteo de tus palabras creando versos al compás del viento.
Ha sido una casualidad pero de poesía en poesía me he tropezado con tu blog y me ha encantado. Un abrazo.
Gracias a tus bonitas palabras yo me tropiezo con tu blog.
Voy a dar un paseo por él para conocer tu poesía.
Muchísimas gracias Pink Panzer.
Un saludito,